Cuchillos Medrano: Los filos siempre han estado presentes en mi vida, he crecido en una familia de amantes de la naturaleza, de personas que dedican su tiempo libre a practicar senderismo, vivaquear, cazar, pescar… Desde niño he visto y observado a mis mayores manejar y cuidar sus filos, navajas, cuchillos y hachas, y les oía decir algo constantemente: «Un filo y saber cómo usarlo es todo lo que necesitas en la naturaleza».
Tenía 13 años cuando, con mis ahorros, compre mi primera navaja, con el permiso de mis padres y con toda la ilusión del mundo. La ilusión se desvaneció el segundo día, cuando los errores de fabricación y diseño de la navaja me hicieron entender algo en lo que nunca había pensado: «no todos los filos son de fiar». En ese momento, otra frase que siempre oía a mis mayores sonó dentro de mi cabeza: «Si quieres algo bien hecho, hazlo tú mismo». Y así descubrí mi vocación, empecé a dibujar mis primeros diseños y a tallarlos en madera, hasta que pude empezar a trabajarlos en acero. También descubrí que internet puede ser una gran herramienta de aprendizaje, son incontables las horas que he pasado delante de una pantalla absorbiendo todo el conocimiento que encontraba sobre cuchillería.
Unos años después, decidí formarme como Técnico en Mecanizado y Diseñador Industrial y así lo hice, pasé por la Formación Profesional para adquirir conocimientos y destrezas que me sirvieran para ser cuchillero. Posteriormente y en la actualidad, sigo aprendiendo de los mejores y he realizado cursos con maestros de la talla de Kyle Royer, Neels Van Den Verg y Jason Knight.
Los cuchillos y navajas son herramientas con un propósito: servir fielmente a su usuario. La herramienta debe ser ergonómica, debe estar perfectamente acabada, sin aristas que puedan hacer daño y con todos los materiales debidamente ensamblados, como si fueran uno; el acero será el idóneo para cada propósito; el diseño de la hoja debe buscar el corte más eficaz y eficiente posible, además deben mantener una estética agradable e inspiradora.
Cada pieza que sale de mi taller es única, con un diseño particular y su correspondiente proceso de fabricación, basado en la forja o el desbaste de los materiales. Los aceros que utilizo para los filos, dependiendo de cada proyecto, son aceros al carbono, inoxidables, pulvimetalúrgicos y damascos. Para los mangos incorporo todo tipo de materiales de calidad, como maderas exóticas, fibra de carbono, resinas y otros materiales exclusivos como el marfil, el titanio y metales preciosos. Los tradicionales cueros y el moderno Kydex, son los materiales elegidos para confeccionar las fundas de mis piezas. Diseñadas en base a los gustos y necesidades de cada cliente.
¿Por qué Cuchillos Medrano es para ti?
Si compartes mi pasión por los filos poco he de explicarte. Como artesano mi principal aspiración es crear piezas irreprochables que, con un uso responsable y adecuado, nunca van a defraudar, que cumplen su función y van a durar y perdurar pues tienen el potencial para pasar de generación en generación y seguir rindiendo. Son cuchillos, navajas y herramientas del siglo XXI que encarnan lo mejor de la tradición cuchillera.
“Alma, corazón y filo”
Cada una de mis piezas nace con un propósito singular, no hay dos iguales, surgen de la combinación de mi artesanía y la voluntad de mis clientes, por eso digo que tienen «alma». Mis piezas hablan por mí y reflejan mejor que nada qué clase de artesano soy y lo que deseo aportar al mundo desde mi creatividad, no existe el arte sin «corazón». Y, cómo no, el «filo», la parte de la hoja que transforma todo lo que toca para convertirlo en otra cosa. Hay un sin fin de posibilidades que nos recuerdan que todo uso de un filo debe ser responsable, sin temor y con respeto.